Zahumerios

Través de los sahumerios de plantas podemos limpiar nuestro cuerpo y espacios de vivienda o trabajo

Quemar Salvia blanca, para transmutar la energía de los espacios
Quemar Enebro, para energetizar el cuerpo y la mente
Quemar Artemisa, para tener sueños lucidos
Quema Cedro, para bendecir la casa o espacios nuevos
Quemar Romero y lavanda, para alejar todo virus, bacteria o enfermedad del ambiente
Quemar ruda, para alejar la mala energía
Quemar canela, para darte calma y tranquilidad
Quemar menta, para calmar tus pensamientos
Quemar Laurel, para atraer la abundancia y prosperidad económica
Quemar cáscara de ajo, para ahuyentar toda mala vibración y envidias
Quemar Palma duce, para armonizar y traer dulzura
Quemar Tabaco, para purificarte
Quemar Copal, para purificar y proteger

Para hacer un ramillete de plantas y emplearlo como sahumerio podemos hacerlo combinando plantas o usar solo una de ellas. También podemos utilizar un incensario y adicionarle incienso y mirra
Siempre debemos pedir permiso a la planta que vamos a cortar, bendecirla y darle las gracias
por el servicio que prestará para trabajar en nuestra limpieza y armonización.

Dejemos que nuestra intuición nos guía con la planta y la cantidad de la planta a usar. Permite que tu ser interno te guie en la cantidad o la clase de planta que necesitamos usar. Si hay alguna planta diferente nos llama a ser usada, le damos la bienvenida y agradecimiento.

Agrupar las hierbas de forma que las longitudes queden similares, armando un ramillete parejo.

Hacer un nudito en la base para luego comenzar a enrollar todo el ramillete con un hilo que mantendrá las hierbas unidas mientras las quememos.

Enrollar todo el ramillete con el hilo, bien apretado. Es importante hacerlo bastante cerrado para que no se escapen las hojas, ni se caigan.

Dejarlo secar en un lugar seco y oscuro, donde no haya humedad o al sol). Cuando lo uses, prende la punta con un fósforo preferentemente, deja quemar unos instantes las hierbas y luego sopla el fuego. Comenzará a echar un humo que será el que utilizarás para la limpieza. Lleva una concha de mar o un plato de barro contigo, cuando pases por la casa para recoger la ceniza que dejarán las hierbas al quemarse.

Procedimiento:

Con tus manos con una pluma o un abanico, guía el humo hacia el cuerpo, el objeto o el área que quieras purificar. Limpia cualquier cosa que sientas que lo necesita, incluidas las habitaciones y los objetos. Si otros miembros de la familia están de acuerdo, puedes limpiar a las personas y las mascotas.

Mantén tu propósito en mente mientras hagas la limpieza. Concéntrate en la curación y en la limpieza e invita a la energía positiva para que entre a tu hogar.

Establece y mantén un horario para hacer la limpieza. Muchas personas hacen una limpieza cuatro veces al año, cuando cambian las estaciones, para mantener la energía positiva y beneficiosa. Además de programar regularmente las limpiezas, puedes limpiar tu casa cuando alguien se enferme o esté deprimido, o inmediatamente antes de cualquier ritual o ceremonia que se realice en tu hogar.

Deja que el ramillete de hierbas se queme, dale las gracias y entiérralo afuera para deshacerte de él.