Milarepa
Rechung cierra los ojos, profundiza el silencio para que sus palabras puedan habitarlo. “El yo es un estorbo que hay que vencer. No hay yo, solo hay camino y la voluntad y la fe para seguirlo. No hay otra acción para realizar. No hay otro deseo que cumplir. No hay otro proyecto. No hay otro futuro. Solo la luz y el camino”. Y Rechung me dice sus últimas palabras de recibimiento. “Ser un buen discípulo es saber que el maestro está en ti. No busques al maestro, busca al discípulo que está en lo más profundo de ti mismo”.
Quiero compartir una experiencia personal al leer este artículo,
Viviendo unas dos semanas de muchas situaciones , me fui hundiendo en la oscuridad , le pedí mucho a la Divinidad y a mis maestros me ayudaran ; y su ayuda fue generosa , me encontré conmigo misma ,y La Luz y mis maestros solo me esperaban a que yo pudiera ver mi propia luz y seguir con ellos el camino ,
Gracias por leerme
Sandra