Liberación
El desapego de las formas, del deseo y de los lazos emocionales que nos aprisionan a la vida ilusoria podemos de verdad conseguir la liberación a través de constantes esfuerzos al renunciar a todos los deseos inferiores y a la falsa personalidad.
La causa de todo sufrimiento es la mente pensante donde residen todas las desarmonías. Nuestros esfuerzos deben estar dirigidos a eliminar la causa de los sufrimientos sin preocuparnos por los aspectos externos mediante el aprendizaje de la disciplina interior, de la Intuición Pura.
Todos los problemas comienzan en la mente porque ella etas compuesta de pensamientos, y los pensamientos traen problemas. No los pensamientos inteligentes, pues no son realmente pensamientos, sino reflejos de la intuición Divina. Es por eso es importante distinguir entre la Intuición pura, divina, creativa, de los estados inciertos de la mente pensante.
Todos los hombres sin excepción aspiran a la paz a la felicidad. Muchos piensan en riquezas y bienes materiales buscando así encontrar la felicidad, pero solo se desvían, siguiendo caminos opuestos.
La riqueza trae el apego, la ambición, la fascinación material. Y cuanto mayor ella sea, mayores serán los obstáculos y sufrimientos porque el mundo material está lleno de sensaciones y falsedades.
La propia relación entre las personas está fundamentada en intereses creados y existe apenas mientras esos intereses existan. Es interesante hacer una perspectiva general de nuestra vida y verificar nuestras fallas y apegos.
La identificación de los hombres con el desánimo y la inarmonía debilitan la disposición de sintonizarse con lo Divino, constituyéndose un impedimento para la autorrealización espiritual.
Solamente cuando el hombre comienza a buscar la Verdad Única es que se encontrara en armonía con todo. Aprenderá las leyes de la naturaleza y se sentirá parte de ella. Esta es la búsqueda del camino espiritual, donde el hombre practica la sagrada meditación y el Maha Bhakti, volviéndose consciente del Ser Universal que realmente es.
La falta de discernimiento es un gran obstáculo en el camino de la autoliberación, pues cuando vamos a sintonizarnos con lo Divino, todo pensamiento, toda atadura con el cuerpo físico, con la mente o con los sentidos es indeseable. Debemos eliminar la irrealidad que proviene de la ilusión del ego, y así encontraremos la realidad suprema.
La impaciencia, el querer resultados inmediatos, es también un gran obstáculo, porque no nos liberamos de la mente y de las sensaciones grotescas sin antes pasar por la autodisciplina.
La duda debe ser eliminada cuando se está buscando la autoliberación espiritual. Solo hay un medio de liberarse de ella: renunciando a ella.
El apego a las personas, a los objetos, al dinero, a la posición social, al sufrimiento, al egoísmo, a los deseos, a la adulación, a la lujuria, al odio, imposibilita a la persona sentirse libre en su verdadera esencia.
Verdad Suprema
Sri Maha Krishna Swami