Amar
Tras un día lluvioso llega la noche, los secretos de los amantes quedan al descubierto, entre el amor y la pasión se confunden los sentimientos, cada cuerpo, cada suspiro, pasan del singular al plural; las voces mudas son reemplazadas por las caricias que no dejan de contarle a los sentimientos la gloria infinita del sentir.
El tiempo embelesado ante tales confesiones decide ser parte del momento, los relojes se detienen y el instante pasa a ser eterno…Locura? Enfermedad? No, simplemente el creer ha sido capaz de escribir una historia inédita para el mundo, un momento de entrega total, de desprendimiento sin límites, así suena el amor, palabra corta pero cargada de fe, compromiso, esperanza, futuro, palabra poco practicada por el vertiginoso devenir de la vida moderna; amor, no son solo las cuatro letras, es el universo infinito de posibilidades que nos abre esta palabra que podría ser sustantivo pero debería ser verbo.
En cada pensamiento o acción de la vida deberíamos practicarlo con cualquier intensidad o profundidad, pero vivámoslo, aprendamos el ser de esta corta y simple palabra que puede cambiar el sentido de nuestras vidas.
El Llanero
Rodrigo Echeverry