El novelista
Un afanado novelista iba dando un paseo cuando se encontró con un amigo. Durante media hora, sin parar, comenzó a hablar de sí mismo, mientras el amigo escuchaba paciente y educadamente. Hablaba y hablaba sobre sus proyectos, sus éxitos, sus viajes, sus ocupaciones y sus circunstancias. De repente, se detuvo un instante. Miró a su amigo a los ojos y le dijo:
—Bueno, basta ya de hablar de mí. Ahora hablemos de ti. ¿Qué te ha parecido mi última novela?
Ramiro A. Calle.